viernes, 18 de enero de 2008

Do you want to die right now? (¿Vos te querés morir en este instante?)


El viernes 3 noviembre último la suerte golpeó a mi puerta, suena mi teléfono celular, era nada más y nada menos que MancusoR, el dios de la joda confirmándome que esa misma noche me pasaría a buscar por mi domicilio para llevarme con él en una de sus tan afamadas noches de gira*, invitación que gustosamente acepté.
La velada transcurrió con una cena, cervezas de dos colores, tragos, charlas de fútbol, mujeres**, anécdotas y otros tópicos comunes con otros amigos que MancusoR había convocado para esa noche.

Las cuatro de la mañana marcaba mi reloj cuando arribaba a mi domicilio, quince minutos después dormía plácidamente en mi cama, entregándome a los placeres oníricos contando despertarme a alguna hora pasado ya el mediodía.

Mis planes se vieron frustrados cuando aproximadamente a las diez de la mañana de ese mismo sábado el portero de mi edificio no tuvo mejor idea que apoyar alguno de sus dedos contra el timbre de mi departamento y así despertarme, a través del portero eléctrico me decía: “Ingeniero… le aviso que va a subir un plomero para revisar una pérdida de agua del departamento de abajo”. Realmente no entendía nada, pero dije: “bueno, que suba”. La llegada de este nefasto, bueno para nada, pedante, soberbio, hijo de un vagón lleno de putas, probablemente cornudo y con mal aliento, del plomero fue algo que logró sacarme de esa tranquilidad que trato día a día llevar adelante. El motivo de su visita era revisar mi baño para controlar que no hubiese ninguna pérdida que afectara a la vecina del piso de abajo.
Su revisión de mi instalación sanitaria considero que fue una de las más breves en la historia de las revisaciones de esta categoría, este funesto personaje ingresó se paró exactamente en el medio del baño y sin acercarse siquiera a la mochila del inodoro, a la ducha u otro lugar dijo: “acá hay que romper, probablemente sea de acá la pérdida”. A partir de ese momento muté en una forma de mi persona que jamás había conocido, simplemente me saqué de mis cabales, les pido imagen la situación para contextualizar el ¿por qué? de mi enojo.

Al concluir con la fugaz revisión, este bueno para nada me dice: “en un par de horas si te parece vengo y empezamos a levantar las baldosas del baño, la ducha y nos fijamos si realmente es de acá la pérdida”. ¡¡NO!! ¡¡DE NO CREER!!

A esta altura del relato deben ustedes saber que en mi vivienda tiene un problema en el comedor debido a una filtración de agua del vecino de arriba, a causa de ello mi techo y mi piso de madera están destrozados. Este tipo quería venir a colaborar con algo más de destrucción haciendo de mi reducto habitacional algo más que lugar detestable para estar.

Ni bien concluye con sus oraciones atiné a decirle: “Mirá, acercate al comedor… ¿vos ves el piso y el techo? Esto hace más de 6 meses que lo tienen que arreglar y nadie se hace cargo, y ¿vos querés que de buenas a primeras te deje entrar en mi casa y hagas mas desastres? NO ES LA FORMA, le grité.
Terminé agregando: “vos y nadie va a venir a romper mi baño hoy y menos para sacarse una duda, rompan en la vivienda donde está la humedad, empiecen por ahí” Lo despedí estrechando su mano sin muchas ganas (aclaro que detesto dar la mano sin fuerza, es una mala señal, pero este mal nacido bien merecido lo tenía).

Lo mal que me sentí en ese momento es al día de hoy indescriptible, lo que más odié fue que me haga levantar de mi plácido descanso, no me diera tiempo para bañarme, atiné a ponerme el primer pantalón que encontré y la remera que había usado la noche de ayer, totalmente apestada, no tenía la cara y los dientes lavados, o sea, cada vez que lo miraba y le hablaba a este gil lo estaba matando suavemente (?).

Si alguien ha pasado por lo mismo que yo, agradecería comparta su experiencia conmigo dejando algún comentario de esta anécdota.

Gracias, son siempre muy amables

Ing. Jean Chichè
Ing.jean.chiche@gmail.com

*A mi esposa Delia: es mentira, no fue unas de las clásicas giras de MancusoR

** A mi esposa Delia: sólamente fue hablar de mujeres. Entendeme querida, sino cito al menos la palabra "mujer" a este blog no lo vista nadie

1 comentario:

サブリナ dijo...

No tuve la dicha (?) de lo que le sucedio, pero si recuerdo al dia posterior cuando me lo conto y toda su furia, hasta le salian rayitos de sus ojos.